EL
MÉRITO DE ABRAHAM
(Extractos del Zohar)
Traducción y notas:
Carlos del Tilo
«Y después de esto, Abraham
enterró a Sarah su mujer, en la caverna del campo de Macpelah,
delante de Mamré, que está en el Hebrón, en el país de
Canaán. Y el campo y la caverna que en él se halla se alzaron
para Abraham como posesión de sepultura procedente de los hijos
de Het» (Génesis. XXIII, 19-20)
Comentario del Zohar
(I- 127a-128b):
Abraham conocía la calidad de
esta caverna de Macpelah y tenía allí su corazón y su gozo,
pues ya había entrado allí y había visto a Adán y Eva
amortajados. ¿Cómo sabía que se trataba de Adán y Eva? Lo
sabía porque había visto la forma de Adán y contemplado allí
una puerta abierta al Jardín del Edén; pues esta forma de Adán
estaba allí, cerca de la puerta.
Ven y ve: Aquel que contempla esta
forma de Adán no puede escapar a la muerte, o sea, que ha de
morir inmediatamente. Pues cuando el hombre va a abandonar este
mundo, ve al Adán primero y en este momento muere. Pero Abraham
contempló y vio esta forma, y sin embargo, sobrevivió...
Abraham tenía un gran deseo de
ser enterrado en esta caverna doble de Macpelah; antes de
enterrar a Sarah ya había penetrado en ella.
Ven y ve: Cuando Abraham penetró
`por primera vez en la caverna, vio allí una luz y la tierra se
apartó delante suyo y descubrió dos tumbas. En el mismo
instante, Adán se alzó en su tumba y en su forma, vio a Abraham
y sonrió. Y Abraham supo en sí mismo que en el futuro sería
enterrado allí.
Abraham le dijo: Te lo ruego (dime
sí) ¿es éste el palacio sin techo? Como para decir que estaba
extrañado, pues en la caverna de Macpelah cuya
explicación es: una caverna dentro de una caverna, tenían
que haber reinado las tinieblas más absolutas, y sin embargo,
veía una luz como en una casa sin techo, abierta hacia lo alto.
Y Adán le dijo: El Santo, bendito
sea, me ha ocultado aquí, y desde entonces hasta ahora me he
escondido como un pez en una zanja... A partir del momento en que
vienes para el mundo, ahora y en lo sucesivo, ya hay una
existencia para mí y para el mundo gracias a ti.
Explicación: Hasta la llegada de
Abraham, Adán y el mundo estaban privados de la perfección y
por esta razón, él mismo tenía que permanecer oculto, a fin de
que las cortezas no se apoderaran de él. Pero cuando vino
Abraham para el mundo, lo restableció a él y al mundo, y ya no
tendría que estar oculto. Y esto es lo que está escrito: En lo
sucesivo hay una existencia para mí y para el mundo gracias a
ti.
Rabbí Simeón dijo: Cuando
Abraham entró en la caverna y trajo a Sarah, Adán y Eva se
alzaron y no quisieron que Adán y Eva fueran enterrados allí.
Dijeron: ¿Es acaso poco que estemos en vergüenza en el mundo
ante el Santo bendito sea a causa de la falta que hemos cometido?
Y ahora una segunda vergüenza se añadirá a nosotros, sentimos
vergüenza ante vuestras buenas acciones.
Abraham les dijo: Estoy dispuesto
a suplicar al Santo bendito sea por ti, a fin de que nunca más
tengas vergüenza ante Él, o sea que le perdone totalmente la
falta. Inmediatamente después, Abraham enterró a Sarah su
mujer. ¿Qué quiere decir «inmediatamente después»? Esto
significa: después de que Abraham hubiera aceptado rezar por
Adán como acabamos de explicar.
Adán volvió a su lugar, pero Eva
no regresó, pues había incitado a Adán a pecar, según está
escrito: "La mujer que has colocado cerca de mí..." y
tenía miedo de que Adán no la recibiera. Pero cuando Abraham se
le acercó, y la introdujo cerca de Adán, entonces éste la
recibió gracias a Abraham. Y lo que está escrito:
"Inmediatamente después, enterró a Sarah su mujer".
No está escrito Sarah, sino eth Sarah, lo que
significa Sarah y con ella Eva, pues Abraham la hizo volver a la
tumba.
Entonces Adán y Eva fueron
apaciguados en su lugar como conviene. Y es lo que está escrito:
(Génesis II, 4): «He aquí los engendramientos de los
cielos y de la tierra cuando fueron creados (bahibaram)».
Y hemos aprendido que puede leerse be-abraham, en
Abraham, pues en bahibaram están las letras de be-abraham;
esto nos enseña que es en Abraham donde Adán y Eva hallaron el
reposo.
En efecto, los engendramientos de
los cielos y de la tierra son Adán y Eva. Pues no está escrito:
«He aquí los cielos y la tierra», sino «he aquí los
engendramientos de los cielos y de la tierra» a fin de dar una
enseñanza sobre Adán y Eva, pues no se trata de los
engendramientos de los hombres. Y a propósito de ellos, la
Escritura dice que fueron realizados (existieron) gracias a
Abraham. ¿Y cómo lo sabemos? Porque está escrito (Génesis
XXIII, 20): «El campo y la caverna que en él se encuentra se
alzaron (o adquirieron valor, vaigam) para
Abraham». Mientras Abraham no había venido, Adán y Eva no
fueron realizados en este mundo. Es para decir que la
explicación de la palabra vaiagam, se alzaron, se refiere
a la «existencia». «El campo y la caverna que en él se
encuentra»: esto se aplica a Adán y Eva que están allí.
Para Abraham» esto quiere decir:
gracias a Abraham. Adán y Eva fueron realizados (o tomaron
consistencia) gracias a Abraham.
Nota del traductor:
La obra de Abraham, o sea, la
venida del Mesías, reúne de nuevo al Hombre y a la Mujer
primordiales que habían sido separados por la falta original.
En esto consiste la obra de los
Justos, cuyo arquetipo es Abraham, como lo afirma el Zohar
en otro fragmento que ofrecemos a continuación.
Zohar I, 87b: Ven y ve:
Cuando se encuentran Justos en el mundo, las bendiciones son
atraídas para los mundos, como está escrito: (Génesis
XXI, 2): «Te bendeciré... y serás bendición». ¿Por qué «y
serás bendición»? Esto hace alusión al hecho de que gracias a
su mérito, serán bendecidos los mundos de arriba y de abajo,
según está escrito: (Génesis XII, 3): «Todas las
familias de la Tierra serán bendecidas en ti», o sea: los
mundos de abajo. «Y bendeciré a aquellos que te bendecirán»,
o sea: los mundos de arriba.
Nota del traductor:
La redención del hombre caído en
este mundo no puede, pues, realizarse más que gracias al mérito
de los Justos que atraen la bendición de arriba sobre el mundo
de abajo.
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